- 1 minute
Compartir
Fusión cultural y diseños limpios: La obra de Teddy Kelly
Una constante aventura
De Estados Unidos hasta Mazatlán.
Si algo define a la obra de Teddy Kelly es la fusión cultural que deja en sus piezas. Nacido en Estados Unidos, Teddy creció en Mazatlán, Sinaloa, lugar donde se inspiró del surf y las tradiciones latinoamericanas. Sus constantes viajes al país norteamericano y su gran pasión por el dibujo lo llevaron a retomar ilustraciones de dibujos animados para crear su propio arte.
“Es muy importante saber de dónde vienes, para saber a dónde vas”
¿Beisbolista, agrónomo o artista?
“El rancho siempre va a estar ahí, por qué no te vas a hacer otra cosa”
Con esas palabras de su padre, Teddy inició su sueño de convertirse en un artista, gracias al apoyo de su familia regresó a Estados Unidos con tan sólo 19 años para cumplir su objetivo. Su deseo logró que Teddy aprendiera mucho más allá de la escuela y empezó a adentrarse en la industria.
“Lo que no me gustaba, lo entendí haciéndolo y de esa forma descubrí que es lo que sí quería hacer”
Composición balanceada, colores y líneas rectas
Ninguna de las piezas de Teddy son solo trazos, líneas y colores, más allá de lo que se pueda ver en un primer plano, sus creaciones tienen todo que ver con la intersección y las dimensiones. Todo se uno en un primer plano y al mismo tiempo no, si se ven desde una perspectiva tridimensional.
En 2019, Teddy colaboró con Anfora Studio para presentar su propia vajilla, llena de la esencia de este gran artista.